Telemedicina:
Desenvolvimento e vantagens
La alergia no es una enfermedad en sí misma, sino la causa de una enfermedad, mientras que el asma es una enfermedad heterogénea, que se caracteriza por un grupo de síntomas que se prolongan o van repitiendo.
Se tivermos que apontar um momento de início do uso da ferramenta como tal, devemos voltar a 1959 e dirigir nosso olhar para a Universidade de Nebraska, em sua Faculdade de Medicina, onde está o primeiro documento que fala de as telecomunicações visuais na área da saúde, especificamente, na especialidade da psiquiatria
De lá para cá, inserido na sociedade da informação, o desenvolvimento tem impressionado em termos de elementos tecnológicos. No entanto, se temos que marcar um marco histórico, é o surgimento da Internet como ferramenta de comunicação, que tem aumentado exponencialmente as aplicações da telemedicina para todas as partes da saúde (pacientes profissionais e o sistema). Veremos também que uma das prioridades de desenvolvimento dos países é aumentar o número de habitantes que utilizam a Internet e os sistemas de comunicação da informação.
¿Cuál es la relación entre alergia y asma?
La alergia no es una enfermedad en sí misma, sino la causa de una enfermedad, o la causa de varias enfermedades al mismo tiempo. Por su parte, el asma es una enfermedad heterogénea, que se caracteriza por un grupo de síntomas que se prolongan o van repitiendo, y que incluye episodios de tos, sibilancias o “pitos” en el pecho y dificultad respiratoria.
Si estos síntomas se dan como reacción a algún alérgeno, entonces se diagnostica asma y alergia o asma por alergia. En otros casos, se puede tener asma sin alergia si la causa de los síntomas es otra, como por ejemplo las infecciones respiratorias por virus.
La alergia es una causa de asma, pero no la única, es decir, que no todas las personas con asma tienen alergia. Así, la alergia influye en el asma de dos maneras: como desencadenante de episodios agudos y como causante de inflamación crónica.
Como desencadenante agudo actúa cuando una persona entra en contacto con el alérgeno y en cuestión de poco tiempo presenta una crisis brusca de asma. Por ejemplo, si una persona con asma por alergia a los caballos respira el polvo que se acumula en el pelo del animal y a los pocos minutos comienza a tener “pitos” y dificultad respiratoria.
Como causante de inflamación crónica, el contacto con pequeñas cantidades de un alérgeno va produciendo una inflamación interna de los bronquios.
Esa inflamación puede pasar desapercibida, pero hace que los bronquios sean más sensibles a todos los estímulos (infecciones, ejercicio, aire frío, tabaco, etc.) que actúan como desencadenantes del asma.
¿Cómo se identifican las sustancias que dan alergia?
A veces es fácil reconocer que una sustancia da alergia cuando el contacto con esa sustancia es intermitente, la sustancia es fácilmente visible y los síntomas aparecen en un corto periodo de tiempo.
En cambio, si los síntomas van apareciendo y desapareciendo por contacto continuo con un alérgeno, es complicado ver esa relación, y si, además, el alérgeno es invisible, como las partículas microscópicas de los ácaros, la sospecha resulta aún más difícil.
En este caso, es mejor recurrir a las pruebas de detección de alérgenos, que pueden ser practicadas en piel o en sangre. Con una prueba cutánea por punción, también llamada "prueba de punción" o "prueba de raspado", se pueden detectar reacciones alérgicas inmediatas a 50 sustancias diferentes al mismo tiempo, como el polen, moho, caspa de mascotas, ácaros del polvo o alimentos.
En las pruebas de sangre, por otro lado, se mide la cantidad de anticuerpos Inmunoglobulina E alérgeno-específica (IgE) en la sangre. Una pequeña cantidad de anticuerpos IgE es normal, pero tener niveles de IgE altos puede indicar una alergia.